Ahí voy con otro ladrillo
Yo modificaría un poco la premisa de partida. Da la sensación de que pretendéis buscar alguna ventaja que sitúe de forma objetiva y absoluta a una dentición por encima de la otra. Esto no es así. En términos evolutivos la “ventaja” que favorece una determinada característica es siempre relativa a un contexto determinado. Ninguna de las dos denticiones es superior a la otra, puesto que en ambos casos está adecuada al tipo de organismos que la disfrutan.
La evolución NO otorga una mejora objetiva y absoluta en las capacidades de los organismos.
Por poner una analogía sobre el caso este de los dientes yo lo compararía con el uso de
bolis desechables “bic” vs.
pluma estilográfica. ¿Se puede defender que uno de los dos sistemas sea intrínsecamente mejor que el otro? Pues no. Ambos sirven para escribir, y en todo caso se acomodan a distintos tipos de necesidades: escribir no es lo mismo para un estudiante de bachillerato que para un ministro. Tanto el estudiante como el ministro te podrán decir inmediatamente las ventajas de su instrumento de escritura, pero estamos de acuerdo en que no se puede hablar de una ventaja intrínseca de uno u otro. Lo que opinemos dependerá finalmente de si estamos más cerca de uno u otro personaje, y retornando al caso de los dientes, solemos pensar (como “ministros” que somos) que el sistema de los mamíferos es mejor porque es más sofisticado y más costoso (aunque no sea tan renovable como los bics). Esto sigue estando sujeto a la relatividad de cada caso: hay mamíferos desdentados (ej: los osos hormigueros) y tan felices que son.
Con esto quiero incidir en que no es fácil hablar “a priori” de las ventajas que aporta una novedad evolutiva. No digo que no se pueda, digo que hay que tener en cuenta que no siempre es obvio. En cualquier caso huyamos de argumentos circulares, por favor (los mamíferos estamos “más evolucionados”. Los mamíferos tenemos dentición tipo X, ergo, la dentición tipo X es más evolucionada).
Para empezar los mamíferos no “surgimos de los reptiles”. El linaje original de los vertebrados amniotas (todos los que no son ni peces ni anfibios) es muy antiguo y se escindió en dos ramas desde tiempos muy remotos, en el Pérmico al menos. Una de esas ramas (rama sinápsida) dio lugar a una vasta estirpe de la que hoy sólo quedan los mamíferos. La otra rama (rama diápsida) tuvo más suerte, ya que aunque muchos de sus miembros están extinguidos hoy sobreviven las aves y otros grupos (tortugas, escamosos, cocodrilos y tuataras) a los que denominamos globalmente “reptiles”. Los mamíferon engloban 4.500 especies conocidas, la rama diápsida más de 16.000. Aquí ganan ellos.
No digo que no haya otros motivos, pero para entender qué ventajas ofreció en su día los dientes sofisticados de los mamíferos hay que entender que todos ellos son
homeotérmicos (de “sangre caliente”) mientras que los reptiles no. Mantener el calor corporal consume ingentes cantidades de energía, por lo que los mamíferos se alimentan mucho más que los reptiles. En una situación así empieza a compensar tener una dentadura que, aunque cara, permita masticar el alimento, y aquí surge la novedad: la dentadura de mamífero sirve para masticar, no sólo para atrapar. Se entiende que esta dentición es inútil para un reptil: ¿para qué invertir tanto en algo que no se va a amortizar?
Esto es especialmente importante para los
hervíboros. Comer plantas es tremendamente poco rentable a nivel energético: hay que emplearse a fondo para triturar el tejido vegetal y aporta relativamente poca energía. Es por eso que los mamíferos herbívoros están altamente especializados: dientes de crecimiento continuo, músculos especiales que aseguren movimientos determinados, etc. Buscad grandes consumidores de materia vegetal entre la línea diápsida ("reptiles" + aves) y no los encontraréis, con una excepción: los dinosaurios (incluyendo ciertas aves) ¿es casualidad que en ambos casos hablemos (más que probablemente) de organismos homeotermos como los mamíferos? Algunos dinosaurios (tipo
Iguanodon) tenían un sistema de masticación de alimento vegetal tremendamente sofisticado que conseguía los mismos efectos que los mamíferos herbívoros pero sin la necesidad de tener una dentición de mamífero ni músculos especiales. Creo que se le llama pleurocinesis.
http://en.wikipedia.org/wiki/Iguanodon#Feeding_and_diet
La evolución a menudo es chapucera, pero muy ingeniosa: con lo que tiene consigue solucionar los problemas que se le plantean a veces de forma muy creativa.
PD: Lo que se ha dicho sobre los dientes y el oído es impreciso. Hay huesos de la mandíbula inferior de los reptiles que pasaron al oído medio de los mamíferos, pero no fueron dientes. Ese tema me parece apasionante. Le dediqué unas líneas hace unos meses:
http://copepodo.wordpress.com/2006/05/2 ... n-mas-iii/
http://copepodo.wordpress.com/2006/05/3 ... in-mas-iv/
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